domingo, 4 de noviembre de 2018

Entrevista y tratamiento para el abuso sexual infantil

El abuso sexual es definido como cualquier actividad sexual entre dos o más personas si consentimiento de una de las partes. Este puede producirse entre adultos, entre un adulto y un menor o incluso entre menores. Por otro lado, existe el incesto, esto es la práctica de relaciones sexuales entre individuos que se relacionan entre sí mediante consanguinidad.

Una vez entendidos los términos anteriores, expondré información acerca de la entrevista investigativa que se lleva a cabo con el niño y el contenido del Manual para el Tratamiento Grupal del Incesto y el Abuso Sexual Infantil desarrollado por la Dra. Gioconda Batres Méndez.

Entrevista investigativa con niños víctimas de abuso

Esta entrevista cuenta con dos objetivos: mejorar la cantidad y calidad de la información que proporciona la víctima en la etapa inicial de la investigación y disminuir la victimización secundaria del afectado por el delito, reduciendo la cantidad de entrevistas a las cuales es sometido en el proceso investigativo.

Se debe evitar que la entrevista investigativa se transforme en un interrogatorio, esta se debe conducir de forma que se minimice la angustia del niño. También es importante que el entrevistador debe adaptar el proceso de la entrevista al lenguaje, ritmo y características del niño. Asimismo, el entrevistador debe procurar abstenerse de valoraciones, ya sean positivas o negativas, respecto de la persona entrevistada o los hechos que describe, o expresar estas valoraciones a través de gestos. Por el contrario, el entrevistador debe adoptar una actitud de neutralidad empática.

Se debe buscar que las condiciones en las que se realice la entrevista se adecuen a las necesidades del niño. Además de obtener información de calidad, una buena entrevista investigativa facilitará la toma de decisiones respecto a la protección del niño o adolescente, y la necesidad de gestionar intervenciones de apoyo.


Planificación de la entrevista investigativa

Determina las cuestiones relevantes de la entrevista y los objetivos de la misma. El entrevistador se debe asegurar de revisar los antecedentes del caso antes de entrevistar al niño, de esta forma podrá conocer aspectos generales de niño y se le facilitará el establecimiento de un adecuado rapport. En la planificación se debe tomar en cuenta lo siguiente:

· Lugar de realización de la entrevista: lugar tranquilo y libre de interrupciones. Se recomienda un lugar adaptado a las necesidades del niño y que favorezcan la familiaridad con el espacio físico. El entrevistador se debe asegurar de tener suficiente material lúdico, pero estos no deben ser ofrecidos como “recompensas” a cambio de su cooperación.

· Fecha(s): fecha de la entrevista y en caso de ser necesario, posibles nuevas fechas.

· Duración: la duración aproximada de la entrevista incluyendo factores como ritmo, descansos y la posibilidad de más de una sesión.

· En la planificación también se delimitará si la entrevista será grabada o no, las razones de ello, y quién se hará cargo de la grabación.

· Asimismo, se debe definir si alguien más estará acompañando al niño en alguna de las fases de la entrevista. La persona de apoyo no debe haber estado implicada el en delito.

· Por último, es necesario definir la información requerida por la persona acompañante y es importante mencionar qué es probable que ocurra luego de la entrevista. Es sumamente necesario considerar las circunstancias que podrían afectar los resultados de la entrevista.

Fases de la entrevista investigativa

Fase I: introducción y encuadre

Al inicio de la entrevista se le debe dar al niño y sus acompañantes una explicación adecuada de la función que cumple el entrevistador y de los objetivos de la entrevista.

El entrevistador debe comenzar una entrevista presentando al niño a los presentes y explicándole al niño en términos apropiados para su edad, el papel y función que cumple en esa investigación el fiscal, el psicólogo, el asistente social o el policía. Asimismo, debe indicar la presencia y ubicación de las cámaras y micrófono en el cuarto y su función, si es que la sesión está siendo grabada.

Fase II: establecimiento de rapport

Se busca generar un espacio que resulte cómodo para el entrevistado. Los intercambios de información inicial no se tienen que relacionar con la investigación, sino se deben enfocar en intereses del entrevistado, como deportes, programas de televisión, juegos favoritos, estudios, etc. La fase no se debe prolongar mucho ya que el período en que los niños son capaces de mantener la atención y concentración es breve. Aquí también se explican objetivos y reglas de la entrevista sin especificar la naturaleza de delito.

Fase III: entrenamiento en un episodio de memoria

El propósito de esta fase es generar un ejercicio de diálogo en donde el niño de un relato breve de una experiencia que haya vivido. Se le puede acompañar con señales no verbales como asentir con la cabeza o expresiones de afirmación (como “ajá”) para que continúe, pero que no lo interrumpan. Se busca que el entrevistado ejercite la comunicación con fluidez y naturalidad necesaria para la siguiente fase, en la que se le solicitará que hable de los hechos como parte de la investigación. En la entrevista se le debe transmitir al niño que es él quien tiene el dominio sobre esta, y que su ritmo, extensión y contenidos van a depender en gran parte de él.

Lo ideal en esta fase es que el niño se sienta cómodo, tranquilo y pueda contar lo que le ha sucedido de forma fluida sin ser enjuiciado. Esta fase consta de dos temas a abordar que se deben proponer en este orden: 1. Se le solicita que dé un relato breve sobre sus experiencias de “el día de hoy” y se le solicita lo mismo respecto a “un acontecimiento especial”. Es de suma importancia la actitud del terapeuta, esta debe ser de atención, respeto e interés.

Fase IV: obtención del testimonio

Se le solicita al niño que, en sus propias palabras, brinde un relato de los hechos relevantes. Esta fase se considera el núcleo de la entrevista y la fuente más confiable de información precisa, ya que se da una narración libre. En papel del entrevistador es el de un guía, no de un interrogador. Se evita anticipar el contenido de la entrevista y no dar una valoración a los hechos (por ejemplo, no decir: “Vamos a hablar de las cosas malas que te han sucedido”). Se le brinda al niño la oportunidad de abordar espontáneamente el tema con sugerencias leves. Es importante que el niño no sea interrumpido para pedir detalles adicionales o aclarar ambigüedades, esto se puede realizar en la fase V o VI.

Fase V: investigando los hechos

Esta fase se orienta a profundizar en la información que el entrevistado ha entregado de forma espontánea en las fases anteriores. Es necesario ampliar el relato del niño por medio de preguntas.


Fase VI: obteniendo otra información de relevancia procesal que el niño no ha entregado

El entrevistador dirige preguntas con el fin de que las respuestas aporten elementos relevantes al momento de acreditar los hechos. También, debe tener el mayor cuidado para no introducir información que pueda influir de alguna forma en el contenido por parte de la víctima.

Es necesario conocer todos los detalles relacionados al abuso, ya que podrían contribuir a acreditar la participación culpable del acusado. Las preguntas en esta fase deberían responder al tipo de delito que se investiga. No se puede acabar una entrevista sintiendo que “no se indagó lo suficiente”, ya que no se estaría cumpliendo el objetivo central de esta entrevista.

Fase VII: cierre de la entrevista

Siempre debe existir una fase de cierre en la entrevista, aun si no ha sido completada, si se ha dado por concluida antes de tiempo o si se ha fijado una nueva reunión. Esta es la fase en la que se le da la oportunidad al niño de realizar alguna pregunta respecto al proceso y el entrevistador debe estar preparado para responderla, debe estar dispuesto a clarificar dudas e inquietudes, entregándole al niño información adecuada para su edad y nivel de desarrollo.

El entrevistador debe procurar que el niño deje la entrevista en un estado mental apropiado. Se puede conversar con él por algunos minutos sobre un tema neutral, que le permita estar en condiciones para retirarse.

Mecanismos de defensa

El niño que ha sido abusado presenta los siguientes mecanismos de defensa:



· Regresión: es un intento que realiza el niño por volver a etapas anteriores a los hechos traumáticos.

· Identificación con el agresor: es un mecanismo que el niño utiliza para evitar sentirse vulnerable e indefenso, dejando de ser la víctima para pasar a ser el agresor.

· Proyección: actúa en el niño cuando proyecta sus sentimientos en el juego y no lo reconoce como propio. Estos sentimientos de desprecio y rechazo hacia el agresor suele proyectarlos en un personaje.

· Disociación: permite al niño sobrellevar la situación alejándolo de la conciencia y no asumiendo como propios los efectos de la experiencia traumática.

· Represión: puede considerarse como una estrategia para proteger la psique al excluir los recuerdos de la conciencia, de modo que no sea recordado ni manifestado conscientemente. De todas formas a pesar de no recordar el niño/a el hecho traumático, los recuerdos intentan manifestarse para ser tramitados, en este caso a través del juego.

· Negación: se produce un desdoblamiento del yo, una parte del niño conoce la verdad y otra la niega, queriendo convencerse a él mismo de que el abuso no ha sucedido; este mecanismo es el que vuelve posible el juego.

El juego en el niño abusado sexualmente

He realizado esta presentación para que puedas conocer acerca de cómo es el juego en los niños que han sido víctimas del abuso:



Actitudes características del niño abusado

La hipervigilancia es muy común en estos niños, es como si se encontraran constantemente en estado de alerta. Además, el miedo es habitual y a raíz del trauma sufrido, puede presentar conductas erotizadas, no sólo entre los personajes de su juego, si no también durante el juego, pero con el psicólogo. Las conductas autodestructivas están presentes en muchos de los niños, ejemplos de esta conductas pueden ser el pegarse la cabeza contra el escritorio, pegarse con un juguete, cortarse, entre otras.


Manual para el tratamiento grupal del incesto y el abuso sexual infantil

Este manual está dirigido a niños entre los 7 y 12 años y recoge los aportes de diversos autores norteamericanos y parte de la experiencia que ella ha desarrollado desde 1990 con niños y niñas víctimas de la violencia sexual en Costa Rica. La doctora refiere que la validación del modelo dependerá en gran medida de la experiencia que los profesionales desarrollen y de sus aportes tanto prácticos como teóricos. Por esa razón considera el manual como “inicial” y sujeto cambios. Además, ha procurado escribirlo en un lenguaje sencillo, comprensible y dulce, con el fin de que pueda ser leído sin dificultad. Quienes utilicen este manual se deben apoyar con la teoría del libro, de su autoría, o con alguna bibliografía afín al tema. Además, debe poseer entrenamiento en la perspectiva de género y en la teoría sobre el incesto y el abuso sexual infantil desde esa perspectiva.

El objetivo primordial del manual es seguir contribuyendo con la desaparición de la violencia sexual hacia los niños de américa, de los crímenes de poder que aún cuentan con la complicidad social, además de apoyar a los terapeutas que tengan en sus manos la vida de niños que han sufrido de esta violencia.


Estructura del manual

A continuación te presento un breve resumen sobre los temas que aborda cada una de las sesiones que incluye el manual. Probablemente te surjan algunas dudas de cómo realizar cada una de las sesiones que te expondré, pero no te preocupes, al final del texto te comparto un enlace para que puedas descargar el manual que contiene el material necesario.

Sesión No. 1: Presentación, establecimiento de las reglas y de la alianza terapéutica

La sesión se debe efectuar en un ambiente cálido y seguro, la pareja de terapeutas debe expresar en forma clara, comprensible y respetuosa. Se recomienda que en la pareja de terapeutas haya un hombre y una mujer. Sin embargo, si no hay recursos, el grupo puede ser conducido por una sola terapeuta o un solo terapeuta. En esta sesión los del grupo se llegan a conocer.

Sesión No. 2: Confianza y apoyo

Generalmente, aquellos niños que han sido víctimas de algún tipo de abuso se mantienen aislados, puesto que se sienten marcados por la traición, porque el secreto impuesto les hace sentir indignos debido a que el abuso sexual derriba la capacidad de establecer confianza y vínculo. Por lo tanto, los terapeutas se deben proponer lo siguiente: brindar a los niños un ambiente de confianza y estar atentos para no permitir comparaciones desfavorables.

Sesión No. 3: ¿Cómo me siento?

En esta sesión cada participante aprende a explorar y expresar sentimientos, pues para sobrevivir el abuso, los pequeños que fueron víctimas tuvieron que separar los sentimientos de los hechos y recuerdos. Reintegrar el recuerdo y los sentimientos es una de las grandes tareas de este modelo, lo cual no es tarea fácil para los niños víctimas de abuso ya que sus sentimientos no fueron considerados anteriormente.

Sesión No. 4: Mitos y realidades. El desarrollo del “NO”

Antes de llegar a la revelación del abuso, en donde se habla directamente del mismo, es necesario evaluar el progreso de los niños, pues el abuso los destroza y aniquila, ya que por su corta edad aún no han logrado fortalecerse lo suficiente y se encuentran desarrollando sus defesas básicas. La reconceptualización cognitiva es útil en esta sesión porque aquí se reflexionará acerca de los mitos debido a que las familias en donde se da el abuso tienden a ser muy estereotipadas.

Sesión No. 5: La revelación

Para este momento del proceso, se espera haber fortalecido lo suficiente al niño en sus destrezas, su capacidad de búsqueda de apoyo y sus habilidades. Sobre el abuso sexual ha existido un silencio histórico impuesto a las víctimas, y permanecen calladas por años, incluso puede que varios niños no puedan hablar de lo que pasó debido a que es vergonzoso para ellos o doloroso, pero esto es necesario y terapéutico, porque les otorgará la sensación de que son creídos y comprendidos por primera vez.

Sesión No. 6: Prevención de abusos futuros

Por cuestiones de socialización, muchos niños a quienes se les enseña a no ser víctimas tienden a repetir el abuso a otros, dado que el amor y el contacto lo sexualizaron. Esta sesión pretende ayudar a estos pequeños a comprender que no es bueno repetir el abuso o maltratar a otros, asimismo, tratará de que el niño reflexione sobre todos los pensamientos que han sido recurrentes desde que se sucedió el abuso.

Sesión No. 7: Valorando al género

El abuso sexual es un abuso de poder, en el proceso de socialización desigual se legitima la injusticia y el abuso hacia los más débiles. En esta sesión se prepara a los niños para que conozcan sus derechos y sus valores, y se contribuye a que se produzca una ruptura en los valores que permiten y promueven las desigualdades.

Sesión No. 8: El enojo

Cuando se es traicionado por alguien querido se despierta un gran sentimiento de enojo. A los niños en especial, se les dificulta expresar lo que sienten, por tal razón lo hacen por medio de la violencia. En esta sesión se debe validar su sentimiento de enojo y hacerles ver que está bien, pero que debe dirigirse a quienes le han hecho daño. Se les darán técnicas que ayuden al niño a controlar su enojo y se le enseñarán alternativas de cosas que puede realizar cuando se encuentre enojado.

Sesión No. 9: El poder

El abuso sexual invade el territorio físico y psicológico de la víctima en contra de su voluntad. Cuando los niños creen que las personas adultas tienen razón, los mensajes destructivos y crueles de quienes los abusaron, tienen un gran impacto en sus vidas, transmitiéndoles el mensaje de ser personas sin valor o importancia. La víctima aprende que es invalidada y que ella no será escuchada, por lo que parte valiosa del proceso de sanación y que se da en esta sesión, es aprender a reconocer estos mensajes y sustituirlos por mensajes positivos. También es importante hacerle ver a los niños que ellos poseen las herramientas necesarias para protegerse.

Sesión No. 10 y 11: Su cuerpo

Los niños víctimas de abuso con frecuencia creen que su cuerpo ha sido dañado físicamente o que el abuso lo ensucia. Como el cuerpo fue el vehículo del abuso sexual, entonces lo odian o sexualizan las relaciones. Por lo tanto, en esta sesión se tratan de resolver todas las inquietudes que el niño pueda tener sobre su cuerpo.

Sesión No. 12: Autoestima

La autoestima es esa percepción de sí mismo, la idea sobre los valores y habilidades propias. Los niños que han sido abusados sexualmente vivieron circunstancias que los llevaron a sentirse “malas personas”, pues el abuso imprime un concepto de estigma y poca valía. Hay vergüenza y culpa asociados. En este momento de proceso, la autoestima debe haber mejorado, pero es indispensable tener una sesión dirigida únicamente a su fortalecimiento.

Sesión No. 13: El futuro

Para este momento se ha concluido un proceso en el que la mayoría salen victoriosos. Habrá algunos que necesiten proseguir por algún tiempo en terapia individual. Se habla sobre la posibilidad siempre abierta de regresar por ayuda, ya que separarse de personas junto a las cuales se han edificado bases de una nueva vida, es una pérdida que genera un entendible, pero inevitable dolor. La Dra. Gioconda Batres recomienda un seguimiento de grupal de dos sesiones cada tres meses. A los niños se les solicita que lleven una carta de despedida a los compañeros y pareja de terapeutas, porque la siguiente sesión será la graduación.

Sesión No. 14. Graduación

Este día debe ser especial, todo debe ser positivo y alegre, deben haber planeado entre todos cómo pasarla lo mejor que puedan. Se les debe hablar de cómo se enfrentarán al mundo como seres más valientes y fuertes para salir adelante, y se les debe entregar un recuerdo o un premio de parte de la pareja de terapeutas sobre todas las cosas logradas por parte de cada uno, este premio debe ser algo que perdure, para que puedan recordar su triunfo, por ejemplo una tarjeta o diploma que diga: “Eres la persona más valiente del mundo. Felicidades por terminar tu proceso”.


Este manual es, sin duda, un gran aporte para los profesionales de salud mental que trabajan apoyando a las víctimas de abuso e incesto. Te comparto un enlace en el que podrás encontrarlo y verificar con más detalle cada una de las sesiones propuestas por la Dra. Batres: Manual para el tratamiento grupal del incesto y el abuso sexual infantil

REFERENCIAS

Batres, G. (2000). Manual para el tratamiento grupal del incesto y el abuso sexual infantil. San José, Costa Rica: ILANUD.