Este método se nombró a partir
de una planta llamada “Erica Tetralix” que se destaca por su fortaleza y
robustez, que produce una flor suave, rosa y adorable. Fue creado en 1940 con
el deseo de llegar al mundo interior del niño, pues el juego se describe como
el territorio entre el mundo real y el mundo interno del niño. Existieron
varios modelos de este método, pero la versión modificada fue desarrollada por
una de las fundadoras de la Fundación Erica de Estocolmo. Sin embargo, hasta
este momento aún era solo con fines terapéuticos. Este método fue terminando de
adquirir forma cuando un psiquiatra infantil llamado Gosta Harding quiso
desarrollar de modo real un procedimiento estandarizado y utilizarlo como herramienta
de diagnóstico. Descubrió que los niños creaban mundos con pequeñas figuras en
una caja de arena y que, frecuentemente, estos mundos eran completamente
personales y asociados al niño y su vida. Danielson y Garding nombraron la
técnica como Método Erica.
¿Qué es el método Erica?
Es un método de diagnóstico y evaluación
del juego en la arena, este no es para otro uso como algún modelo de
psicoterapia. Es decir, los materiales sí pueden ser utilizados para la terapia
de juego, por ejemplo, pero para esto no puede ser utilizado el método per sé,
ya que recalco que este es únicamente para diagnóstico. Este combina la solidez
de una observación formal basada en la realidad con el contacto empático hacia
el infante. Este método tiene el objetivo de evaluar el funcionamiento
psicológico de los niños por medio de la utilización de algunas figuras y arena
en dos modalidades: seca y húmeda. Es un método utilizado por psicólogos,
psiquiatras, trabajadores sociales y orientadores escolares para evaluar al
paciente. El profesional que utilice este método de diagnóstico debe tener
conocimientos y experiencia en el área infantil y en los métodos proyectivos.
Logística
Cuando los niños entran a la
sala de juegos se les debe presentar las figuras que se deben encontrar colocadas
en un estante abierto con repisas divididas en 12 compartimientos. El material
debe ser accesible y que le proporcione al niño una perspectiva global del
contenido del armario. Las figuras se encuentran divididas en 10 categorías:
1. Soldados, vaqueros e indios
2. Otras personas
3. Animales salvajes
4. Animales de una granja
5. Vehículos de transporte
6. Materiales para la guerra
7. Construcciones
8. Verjas (barreras, vallas)
9. Casas y árboles
10. Objetos para interiores
El orden de las figuras debe
ser cuidadoso, verticalmente se deben colocar las figuras de pacíficos a agresivos,
y horizontalmente sin son móviles, activos o estáticos. También es útil proporcionar
a los niños un poco de plastilina o arcilla para que puedan crear algo si creen
que hace falta. Todas las figuras poseen significados simbólicos, algunas lo
poseen por individual y otras son ambiguas. Además de los estantes con figuras,
el niño se encontrará con un cajón de madera lleno de arena seca sobre una mesa
de su estatura y otro cajón en el piso que estará lleno con arena húmeda.
Observación del juego
En las instrucciones se le explica
al niño que encontrará diversas figuras con las que puede construir lo que él
quiera en cualquiera de los cajones. El terapeuta debe sentarse donde pueda
observar al niño y registrar su conducta, debe ser empático y estar disponible
para el niño, pero tiene que tener cuidado de no entrometerse en la
construcción y no interpretar lo que está haciendo. El objetivo de esta conducta
por parte del terapeuta es que el niño pueda sentirse cómodo y libre para
expresar lo que piensa y siente a través de las figuras y la arena. En este
caso el “rapport” no es lo que se busca como terapeuta, ya que este método es
únicamente de evaluación, por lo que entre menos se realice una relación
terapéutica con el niño mejor, pues una relación de este tipo podría tener como
resultado que el niño busque la aprobación del terapeuta.
El niño cuenta con 45 minutos
para la construcción y se le debe avisar cuando resten 5 minutos, sin embargo, puede
terminar antes. Cuando la observación finaliza, el terapeuta solicita al niño
que le cuente acerca de lo que construyó. Se deben evitar comentarios de elogios
o críticas a la construcción. Las observaciones se hacen en 3 sesiones consecutivas,
después de la primera las instrucciones ya solamente son: "El día de hoy
puedes hacer construcciones en el cajón de arena. ¿Te gustaría estar en la
arena seca o en la húmeda?”. Por otro lado, es importante que el terapeuta en las
3 sesiones se fije en los materiales que está utilizando y cómo se desarrollan
las construcciones.
Evaluación del juego en la
arena
Para evaluar las
construcciones debe realizarse el análisis de cada cajón de arena por separado
y la evaluación final es basada en la continuidad y repetición de los elementos
estructurales y temáticos. Las formas de observación son de ayuda para
proporcionar una visión globalizada de aspectos formales como lo son: qué cajón
elige el niño, cómo trata la arena, qué porcentaje de la superficie del cajón
utiliza o si solo utiliza esquinas, cuánto tiempo se tarda o qué figuras
utiliza.
Interpretación de los
aspectos formales
Selección de la arena: hace
referencia a la expresión de impulsos y fantasías del niño a través del juego
con la arena. Frotar la arena con sus manos y ropa es una conducta común. Los
niños que son ansiosos son los que pueden preocuparse si la caja se cae y ellos
se ensucian. Puede que durante la construcción los niños realicen algún ocultamiento,
es decir, que oculten objetos en la arena, y eso puede simbolizar muerte o entierro
de personas reales o imaginarias. También puede servir para manejar una ansiedad
por separación. La arena que elijan es importante, puede ser diagnóstica. Es
común que prefieran la arena seca por ser segura y no requerir mucho
esfuerzo para manejarla. La arena húmeda es elegida con frecuencia por
niños extrovertidos o que tienen una forma de juego enérgica o agresiva. El niño
utiliza entre 50 a 70 objetos, si utiliza menos de 50 se considera un mundo
vacío, si usa más de 100 entonces es un mundo saturado. Además, si
es un mundo vacío y no coloca ninguna figura humana, puede ser indicio de psicopatología.
Nivel de desarrollo dentro
del juego en la arena: los niños juegan según su edad de desarrollo, a los más
pequeños les gusta explorar y experimentar con la arena, su juego se basa en la
curiosidad y la sorpresa. Si el niño se basa en “intentar” y no toma ningún
rol, entonces el juego es exploratorio o funcional. De 4 a 7 años
avanza la fantasía y aumenta el desempeño de roles, luego de los 7 años ya
están más aptos para construcciones y el juego está orientado a objetivos.
Cambios y correcciones:
los niños pueden realizar cambios mientras van construyendo su mundo, si estos
son tranquilos u orientados a objetivos, pueden desarrollar una autocrítica orientada
a la realidad, pero si los cambios son frecuentes entonces se crea una
autocrítica severa y un sentimiento de no poder cumplir expectativas. Si el
niño evita correcciones con frecuencia puede que sean más rígidos e inflexibles.
Límites de tiempo: el
niño más pequeño suele utilizar el máximo de su tiempo mientras que el niño mayor
sí indica cuando finaliza su creación. Los niños inseguros utilizan pocos
objetos pero en un tiempo prolongado ya que perciben inquietud sobre dónde
colocar los objetos. Si el tiempo es reducido representa falta de creatividad y
fantasía o problemas para la duración de la concentración. El terapeuta debe
fijarse en la latencia de respuesta que es la cantidad de tiempo que
transcurre desde que se brinda la instrucción hasta que comienza la
construcción. Mientras mayor sea la latencia, mayor es la resistencia e
inseguridad.
Niveles de composición:
el niño buscará ordenar y dar significado a la construcción de su mundo,
reunirá figuras de manera significativa de forma que cree escenas.
Generalmente, la construcción de un niño representará uno los siguientes niveles
de composición:
· Colocación indiferente: indica que aún no pueden percibir la relación entre las figuras.
· Clasificación: a los tres años los niños clasifican juguetes por similitudes. Los niños que clasifican juguetes con simplicidad, con frecuencia es por defensa ante el caos, la rigidez de la clasificación les da seguridad o límites.
· Configuración: hace referencia a la formación de patrones geométricos sin considerar la representación de juguetes. Esto es más común en niños de 4 años.
· Categorización simple: el niño comprende el significado de las figuras y los coloca juntos de forma sencilla. El niño puede comenzar a explorar y percibir el mundo según principios que sean más realistas.
· Yuxtaposición: se juntan figuras individuales, basados en lo que representan, más que a partir de que pertenezcan a alguna categoría. Se basa en el contenido deseado de la escena. Por ejemplo, el niño junta animales salvajes y domésticos con el fin de crear un zoológico.
· Agrupación convencional: capacidad de combinar la forma y el contenido, y realizar composiciones sencillas.
· Escena significativa: refleja la capacidad de un niño para relacionarse con la realidad de manera adecuada y es una representación de su situación dentro de la vida real.
· Composiciones atípicas: en algunos casos no se puede comprender la conducta agresiva o fijación de etapas del desarrollo anteriores. Existen tres tipos de composiciones atípicas: el agrupamiento caótico que es cuando el niño llena el cajón de arena con figuras que no tienen relación entre ellos, el agrupamiento extraño que es cuando el niño combina figuras de forma rara y no puede proporcionar una explicación significativa, y por último el mundo cerrado que es cuando el niño coloca verjas o muros en torno a las escenas, esto sugiere necesidad de control y protección.
· Colocación indiferente: indica que aún no pueden percibir la relación entre las figuras.
· Clasificación: a los tres años los niños clasifican juguetes por similitudes. Los niños que clasifican juguetes con simplicidad, con frecuencia es por defensa ante el caos, la rigidez de la clasificación les da seguridad o límites.
· Configuración: hace referencia a la formación de patrones geométricos sin considerar la representación de juguetes. Esto es más común en niños de 4 años.
· Categorización simple: el niño comprende el significado de las figuras y los coloca juntos de forma sencilla. El niño puede comenzar a explorar y percibir el mundo según principios que sean más realistas.
· Yuxtaposición: se juntan figuras individuales, basados en lo que representan, más que a partir de que pertenezcan a alguna categoría. Se basa en el contenido deseado de la escena. Por ejemplo, el niño junta animales salvajes y domésticos con el fin de crear un zoológico.
· Agrupación convencional: capacidad de combinar la forma y el contenido, y realizar composiciones sencillas.
· Escena significativa: refleja la capacidad de un niño para relacionarse con la realidad de manera adecuada y es una representación de su situación dentro de la vida real.
· Composiciones atípicas: en algunos casos no se puede comprender la conducta agresiva o fijación de etapas del desarrollo anteriores. Existen tres tipos de composiciones atípicas: el agrupamiento caótico que es cuando el niño llena el cajón de arena con figuras que no tienen relación entre ellos, el agrupamiento extraño que es cuando el niño combina figuras de forma rara y no puede proporcionar una explicación significativa, y por último el mundo cerrado que es cuando el niño coloca verjas o muros en torno a las escenas, esto sugiere necesidad de control y protección.
REFERENCIAS
Schaefer, C. y O’Connor, K. (1983). Manual de terapia
de juego. Método Erica de diagnóstico y evaluación del juego en la arena –
Schaefer y Sjolund. México: Editorial Manual Moderno S.A.